La productividad implica la mejora de procesos y ésto significa una comparación favorable entre la cantidad de recursos utilizados y la cantidad de bienes y servicios producidos. Con frecuencia el termino de productividad se confunde con que a mayores recursos humanos empleados habrá más productividad. Y no es cierto. Seguro que en tu vida laboral has conocido a dos empleados con tareas similares que, a mismo número de horas, completa uno más tareas que el otro. Es más, igual el más lento se queda fuera del horario establecido para finalizar dichos trabajos. Uno es más productivo que el otro, y no sólo eso, más eficiente. Introducir la concentración en tu flujo de trabajo, en tu rutina diaria logrará disparar tu productividad hasta límites inimaginables. Tanto si eres emprendedor como si eres empleado por cuenta ajena, te vendrán bien los consejos que vamos a proponerte.
- Ten MUY claro qué tarea tienes que hacer y qué tienes que hacer.
- Segundos antes de empezar di incluso en voz alta lo que vas a hacer, el propósito y lo que quieres y vas a conseguir.
- Haz sólo una cosa a la vez. Multitarea = distracciones + interrupciones.
- Que lo que hagas sea pequeño. Una tarea pequeña y sencilla facilita la concentración. Y si es grande o compleja despiézala en pequeñas tareas.
- Cierra cualquier notificador de tu ordenador: tu Email, Twitter, Facebook y cualquier campanita que “ding” o “dong”.
- Pon tu móvil en silencio y boca abajo. Si llaman que te dejen un mensaje en el buzón de voz, que para eso lo pagas todos los meses.
- (Sólo si te ayuda) Escucha una música que fomente tu atención.
- Si estás en una oficina pide que no te pasen llamadas.
- Pide y advierte a tus compañeros que NECESITAS una hora de trabajo continuado. Que NO te molesten.
- Ponte unos auriculares. Aunque no estés escuchando música si alguien te ve así tendrás menos posibilidades de que te interrumpa.
Recopilación vista en Think Wasabi
Foto|ArielAmanda
Buenos consejos. un saludo