El informe que ha dado conocer la Comisión Europea sitúa a España como uno de los países con un desarrollo «moderado» de la innovación. Destaca como puntos fuertes los sistemas de investigación (sobre todo, participación en estudios internacionales) y el apoyo financiero (excepto ingresos por licencias y patentes).
Como variables del estudio que más han crecido están la cooperación científica internacional y los gastos en innovación que no es I+D. En cambio, la mayor disminución se ha producido en las firmas de capital riesgo.
¿Cuáles son los líderes?
Por países, a la cabeza de la innovación se encuentran: Dinamarca, Finlandia, Alemania y Suecia. En la parta más baja de la clasificación, en cambio, están: Bulgaria, Lituania y Rumanía. «Los países que se hallan a la cabeza de la clasificación en lo que respecta al indicador de innovación compuesto tienen en común una serie de puntos fuertes en sus sistemas de investigación y de innovación nacionales, con un papel clave de la actividad empresarial y la colaboración entre el sector público y el privado», explica el documento.
Según este marcador, denominado ‘Unión por la innovación’ 2011, casi todos los Estados miembros han mejorado sus resultados de innovación. Si bien, «la mejora de estos resultados se está ralentizando y la UE no reduce el persistente desfase que existe con los líderes mundiales de la innovación, es decir, Estados Unidos, Japón y Corea del Sur», asegura la Comisión.
Pese al estirón de los emergentes, la UE sigue manteniendo las distancias sobre países como China, Brasil, la India, Rusia y Sudáfrica, advierte el documento.
El obstáculo más destacado en la UE para la innovación es el comportamiento del sector privado. Según Antonio Tajani, comisario de Industria y Emprendimiento, «necesitamos sistemas nacionales de investigación e innovación equilibrados que ofrezcan a las empresas un entorno favorable a la innovación».
Fuente > Expansión