Más de 100 trabajadores de la Cámara de Comercio de Madrid se concentraron ayer por la mañana para protestar ante la inminente presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE). Fuentes del comité de empresa confirman que la dirección ya les ha comunicado su intención de presentar un ERE a partir del próximo 30 de julio, fecha en la que está previsto cerrar el plazo para las bajas pactadas.
El expediente que ultima la Cámara de Comercio de Madrid será el segundo que se presentará en las 88 delegaciones que tienen las Cámaras en España. El primero le correspondió a la Cámara de Comercio de Barcelona, que presentó el pasado 30 de junio un expediente de regulación de empleo (ERE) para 53 personas, lo que supuso una reducción del 69% de la plantilla.
Previamente a la presentación del ERE, la Cámara llevó a cabo un recorte del personal a través de prejubilaciones que afectaron a otras 30 personas. La dirección justificó esta reducción de plantilla por el fin del recurso cameral que redujo en un 70% los ingresos. En otros centros también se han producido bajas, la mayoría pactadas con la dirección, como en las Cámaras de Valladolid, Cádiz, Ciudad Real, Ávila y Soria.
Desde que el Ejecutivo suprimió en diciembre las cuotas obligatorias que las empresas pagaban a las Cámaras de Comercio, se han producido 38 bajas pactadas en la Cámara de Madrid, lo que supone el 13% de la plantilla, integrada por 300 trabajadores. A falta de dos semanas para que se cierre el plazo de las bajas pactadas, siempre según esas fuentes, la dirección ya ha anunciado la presentación de ese expediente, que al menos afectará, tal y como fija la ley, al 10% de la plantilla (30 personas). Un portavoz de la Cámara de Madrid lo niega y asegura que no hay nada al respecto.
Si se suman bajas pactadas y despidos, la reducción de plantilla se elevará como mínimo a 70 personas, el 25% del total. Esa cifra se acerca a la anunciada por el presidente de la Cámara de Comercio de Madrid y vicepresidente de CEOE, Arturo Fernández, en enero nada más conocer la supresión del recurso cameral. Finalmente rectificó y optó por no tomar ninguna decisión al respecto a la espera de conocer cómo avanzaban las negociaciones con el Ejecutivo para buscar compensaciones al fin del recurso cameral.
Desde el comité de empresa culpan de los despidos a las dos consultoras (Equipo Económico y Fundación Lafer) contratadas para diseñar el plan de viabilidad. «Desde un primer momento han expuesto que la salvación pasaba por el recorte de personal y han esquivado el debate sobre el patrimonio». Los empleados de la Cámara trabajan en un edificio alquilado en la zona del Campo de las Naciones, mientras que disponen de al menos otros tres inmuebles en propiedad vacíos en Madrid. A uno de ellos se trasladarán en breve, según acordó ayer el pleno de la Cámara.
Fuente > Cinco Días