Y es que la situación bancaria actual está obligando a los pequeños usaurios de cuentas corrientes a guardar el dinero bajo el colchón y es que, por ejemplo, el mantenimiento de una cuenta corriente alcanza un máximo de 75 euros frente a los 42 de 2011, un 78% más.
El emprendedor ante esto tiene un reto. Por supuesto que no va a quitar todas las cuentas corrientes y llevarse el dinero a su casa, simplemnte por razones de logística y funcionamiento de los cobros y pagos, pero lo que si está obligado a hacer con esta situación es a unificar cuentas y quitar aquellas que no use, quedándose, si puede, con una sola, lo que seguro le reducirá costes.
Y es que desde que en julio de 2011 el Banco de España dejara de regular las comisiones que bancos y cajas cobran a sus clientes por sus servicios y productos, las entidades financieras han aprovechado para aumentar estas cifras un 40% de media durante el último año.
A partir de ese momento, la única obligación para las entidades consiste en comunicar a sus clientes cuáles son estas comisiones, pero esto no siempre se hace de forma clara. De este modo, hay servicios que han registrado un repunte de hasta un 300% en sólo un año.
Por ejemplo, el mantenimiento de una cuenta corriente alcanza un máximo de 75 euros frente a los 42 de 2011, un 78% más. El mínimo se mantiene en los 12,50 euros.
Otros conceptos, como la realización de transferencias, han pasado de los 5 euros que costaba en 2011 a 20 euros este año, mientras que el mínimo de este tipo de operaciones continúa en los 2 euros (un 0,18%).
Fuente > Facua