-¿Por qué quieren ellos poner en marcha una empresa?
-¿Tenemos todos los promotores del “proyecto”, el mismo proyecto?.
-¿Hasta dónde llegamos para sacar adelante el proyecto empresarial?
-¿Reunimos entre las personas promotoras los conocimientos y/o las habilidades necesarias para desarrollar la actividad?
-¿Reunimos experiencia y contactos en el sector de actividad en el que pretendemos trabajar?
-¿Conseguimos reunir recursos financieros suficientes para poner en marcha la empresa?
-¿Podremos trabajar juntos?
-¿Qué aporta cada uno al proyecto? (conocimientos, habilidades, dinero, bienes, trabajo)
-¿Cuánto está dispuesto a perder cada persona en poner en marcha la empresa? (dinero, tiempo, esfuerzo)
-¿Hasta dónde llega la confianza entre los diferentes integrantes del proyecto?
Y, por último, lo más importante, a la hora de elegir compañía para iniciarnos como empresarios no debemos fiarnos de nadie, ni de familiares, ya que no es lo mismo conocer a alguien que compartir trabajo, esfuerzos y dinero.
Foto | FotoRita [Allstar maniac]